Foto: Prensa Area Metropolitana
El caracol africano se caracteriza por su tamaño, puede alcanzar los 30 cm; las rayas violáceas de su caparazón y el color café rojizo de su piel.
Por lo menos unos dos mil caracoles africanos (Achatina fulica) fueron recogidos en desarrollo de la jornada de limpieza de la cañada de la Quebrada de las Nieves en el Municipio de Girón.
La actividad se realizó de manera coordinada por el Área Metropolitana de Bucaramanga, a través de la Subdirección Ambiental, la Alcaldía de ese Municipio, Empas, Electrificadora de Santander, Policía Nacional y la Defensa Civil.
Estos animales de aspecto inofensivo se han convertido en una verdadera plaga que, además de afectar los ecosistemas y cadenas bióticas de los sectores donde hace presencia, revisten particular peligro para las comunidades, en especial menores de edad.
Los niños, sin prevenir el peligro, juegan con ellos y terminan siendo afectados por graves enfermedades intestinales, apendicitis y, en casos extremos meningoencefalitis y la equistosiomasis o fiebre de caracol.
Foto: Prensa Area Metropolitana
En desarrollo de la recolección de los caracoles en la Quebrada de las Nieves, el peso de los animales recogidos alcanzo un total de 108 kilogramos.
“La baba, que recordemos, es además el esperma a través del cual, de manera asexuada se multiplican, recoge bacterias y sustancias nocivas para el organismo humano, pues el caracol al enterrarse, tiene contacto directo con heces de rata que son las transmisoras de estas bacterias”, aseveró Tomás Torres, ingeniero ambiental del Área Metropolitana.
Explicó que cuando la persona tiene contacto con esa baba, “a través de la piel se produce el contagio”.
Durante el operativo realizado en las últimas horas en apenas 500 metros de área intervenida, se recolectó una cantidad de caracoles que supera las estadísticas normales y que prende las alarmas, porque el nivel de incremento de esas poblaciones puede decirse que es exponencial, por lo que se clasifica como plaga.
Foto: Prensa Area Metropolitana
Aspecto del operativo que incluyó recolección de material de reciclaje y desechos sólidos, macaneo y la recolección de caracoles.
En África esos animales tienen enemigos naturales que controlan su expansión, pero en territorios como los sectores donde ahora se multiplican a su antojo, no solo afectan la salud de las personas, sino que literalmente arrasan y devoran cultivos y plantas vecinas de las zonas húmedas cercanas a las quebradas, generando un desequilibrio total en la cadena alimenticia del ecosistema.
Prensa y Comunicaciones / Área Metropolitana de Bucaramanga
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