Foto Adolfo Enrique Herrera / Alcaldia de Bucaramanga
Los propietarios, comerciantes y compradores de los negocios que están ubicados sobre la carrera 16 con carrera 33, no salen de su asombro. Hace menos de un mes el alcalde social, Luis Francisco Bohórquez, les anunció que esa vía, al igual que otras del centro, están en el paquete de calles y carreras que serán repavimentadas y sometidas a mantenimiento y embellecimiento por parte de su Administración.
Se trata del programa Bucaramanga sin huecos, que se adelantará durante los próximos 30 meses, con una inversión que supera los $42.000 millones de pesos.
Para muchos ese fue un anuncio más que sería incumplido, porque a eso ya se habían acostumbrado desde hace más de 20 años. ¡Sólo promesas!
Por eso, esta mañana, al llegar a su local comercial Merconfites La 16, la señora Gilma Delgado Gómez, propietaria, quedó sorprendida con la repavimentación de la carrera 16 de Bucaramanga. El pavimento llegaba a pocos metros de las puertas de su negocio. Aún humeante. Era realidad.
Gilma Delgado Gómez
“Excelente, mire que sí se puede. Excelente la repavimentación y la calle despejada. Creo que tendremos más afluencia de gente, más seguridad. Tenemos que apoyar al Alcalde, porque si no hubiera compradores ambulantes, pues no habría vendedores ambulantes…”
El joven Gustavo Sandoval, hijo del propietario de la talabartería La Casa de Los Aperos, ubicada sobre la carrera 16 con calle 33, llegó hace cuatro días a la capital santandereana y ya se declara enamorado de La Bonita.
Gustavo Sandoval
“No nos esperábamos que esto fuera a amanecer tan bonito. Bien decorado, bien arreglado, y pues estamos contentos con la pavimentación”.
Gustavo recuerda que hace 20 años no se pavimentaba la vía y reconoce las bondades de la determinación del Alcalde al devolverles el espacio público a los bumangueses.
Gloria
Al despuntar el alba, Gloria llega todos los días a su negocio de abarrotes llamado Mercatodo, en clara alusión a que allí se distribuye desde un dulce de $100 pesos hasta arroz por arrobas u otros productos.
Y con la dulzura alegre de la gente humilde, dice que todo “está muy bonito. Para nosotros como comerciantes, espectacular, porque ya pasan taxis, ahora puede venir cualquier vehículo…”
Gloria no oculta su alegría. Sólo repitió su nombre de pila dos veces, como exigiendo sin exigir que no se le diera mayor importancia a su identidad.
Arturo Valencia
Desde su actividad en las calles, Arturo Valencia, de profesión taxista, aprovecha para aportar otro de punto de vista a los beneficios que otorga la recuperación del espacio público del centro de la ciudad y la repavimentación de varias de sus vías.
“Mejora la movilidad y para los peatones también. Creo que la ciudad tiene mejor presencia, porque creo que ninguna ciudad vive lo que se estaba viviendo últimamente en Bucaramanga, por el desorden de mucho vendedor…”
Arturo está convencido de que las cosas deben continuar así, “por el bien de todos…”
Autores: Carlos Ibarra, Édgar Sánchez
Prensa / Alcaldía de Bucaramanga
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